Fumigación del Cimex lectularius (chinche común o de cama) en Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura. Es un insecto hemíptero de la familia Cimicidae. Su alimentación es hematófaga, a través de sus conductos chupadores que extraen la sangre principalmente de seres humanos y en su defecto, de animales. Su nombre vulgar proviene del hábitat frecuentemente usado: colchones, sofás y otro mobiliario. Es un insecto preferentemente nocturno, ya que espera a que su víctima esté profundamente dormida y no haya actividad alguna en el cuarto para acercarse.
Como miembro perteneciente a la familia de los insectos, su cuerpo está dividido en tres partes: Cabeza, tórax y abdomen, y su alimentación es exclusivamente de sangre. En su boca posee dos tubos que clava en la víctima, por el primero de ellos inyecta un saliva que posee un efecto analgésico y anticoagulante, para que la victima no detecte su
presencia, y por el otro conducto chupa la sangre. Su forma de actuar suele ser la misma, poseen un lugar en la cama o cerca de ella, donde tienen cobijo y oscuridad, y permanecen ocultos a simple vista, esperan que la persona se duerma (su mayor actividad se produce una hora antes del amanecer) y entonces producen la picadura, normalmente pican varias veces buscando una vena o arteria por donde circula la sangre, produciendo la característica línea de puntos que identifican a ésta especia, aunque puede llegar a confundirse con las de las pulgas.
¿Cómo detectamos si tenemos chinches de cama? Pues como hemos dicho anteriormente es facil confundirlas con pulgas o mosquitos si no sabemos qué es lo que buscamos. Normalmente la picadura de mosquito es aislada, una sola, así descartamos éste insecto. Las picaduras de pulgas son varias muy cercanas al igual que las chinches, pero la diferencia está en la forma del grano. Los de las pulgas tienen un punto rojo en el centro, justo en el sitio que picaron, mientras que las picaduras de chinches por lo general, tienen un aspecto similar al del acné, un hinchazón de la piel con una bolsa blanca en el centro que contiene una especie de pus, aunque no siempre produce ésta reacción en la piel, dependiendo del nivel de intolerancia a la saliva del chinche, puede producir lesiones más severas.
Detectar a las chinches, ¿Dónde las buscamos? Como ya hemos dicho antes, hay que buscarlas cerca de su lugar de alimentación, es decir, cama, mesa de noche, cuadros cercanos, armarios, etc. Hay que buscar posibles rendijas, aunque donde seguro que estarán es en el propio colchón, en las costuras, por debajo, costuras de edredones y nórdicos, etc.
Haciendo un poco de historia, a finales del siglo XX, fue prácticamente erradicada como plaga, con el uso de potentes insecticidas como el DDT contra cucarachas y hormigas de la vivienda, colateralmente se acabó con las chinches de cama. Sin embargo, sobrevivió una pequeña “resistencia” en granjas de animales, donde pudieron escapar de los pesticidas. A finales del siglo XX, se prohibieron todos los pesticidas potentes, en las casas se empezó a utilizar cebos contra cucarachas y hormigas, que no afectaban a las chinches, con lo que ya tenían camino libre. Pues bien, las personas que trabajaban en granjas donde había chinches, comenzaron a traerlas a casa de nuevo, con lo que empezaron el siglo resurgiendo como plaga y llegando a ser un problema en muchos lugares del mundo. Recientemente se han mostrado resistentes a todos los insecticidas que se vendan legalmente al público en general, con lo que el problema es peor de lo que parece. Continuamente vienen saliendo productos para profesionales, que logran acabar con ésta infestación, pero sólo están al alcance de empresas autorizadas como TENEPLAGAS
En la imagen superior, podemos ver los distintos estados de las chinches. Blanco, ovalado y de un milímetro, son los huevos. Marrón oscuro, ovalado y plano son chinches en edad adulta que se han alimentado de sangre. Semitransparente, tenemos las ninfas, individuos inmaduros pero que ya se alimentan de sangre. En amarillo tenemos las mudas, piel que ha quedado atrás de un individuo al crecer.
¿Cómo combatimos contra las chinches? Pues bien, hay métodos para controlar desde nuestras posibilidades las chinches, no de erradicarlas, pero sí de intentar disminuir sus efectos. Lo primero de todo, es que si nuestro hogar está libre de chinches, no las traigamos a casa, como equipaje. Efectivamente, el principal foco de infestación de las chinches son los hoteles, alojamientos, etc. A cualquier hotel que viajemos podría no estar libre de éstos indeseables insectos. Cuando entremos en una habitación en vacaciones, deberemos inspeccionar bien los lugares antes descritos, eso sí, poniendo nuestras maletas mientras revisamos, en el baño para que no se cuele ninguna. Imaginemos que por un casual, si no hemos sido cuidadosos en nuestros viajes, se nos cuelan en casa, y a través de los sintomas de las picaduras, detectamos que tenemos chinches en casa. Pues bien, siempre lo recomendable es llamar a unos profesionales para que actúen a tiempo, ya que es una plaga muy difícil de erradicar, pero imaginemos que no podemos llamarlos por lo que sea. Bien, lo primero es verificar los lugares más cercanos a las camas, edredones, somieres, nórdicos, almohadas, y todas sus costuras. Si detectamos un foco nunca utilizar insecticida ya que son casi inmunes, lo recomendable es que si disponemos de una vaporetta o similar, el vapor por encima de 50º se ha demostrado eficaz contra éstos focos. Una vez revisado todos los alrededores de la cama, deberemos “aislar” nuestro lugar de descanso, untando las patas de la cama con vaselina, ya que no podrán trepar por ellas o en su detrimento, cinta de doble cara, ya que quedarán pegadas a ella. Diversos estudios han demostrado que no solo suben por las patas de las camas y armarios, sino que trepan hasta el techo de la habitación y se dejan caer cuando detectan focos de calor y dióxido de carbono (síntoma de que hay presente un ser vivo en las cercanías) Pues bien, también ahí podemos contar con un aliado, aunque normalmente lo maltratamos con insecticidas pero lo que no sabemos es que es un depredador natural de las chinches de cama.
La araña doméstica o thanatus flavidus es una aliada natural contra chinches y mosquitos, ya sabemos que hay muchas personas con aracnofobia pero debemos saber que no todos los “bichos” son perjudiciales para nuestro hogar. No es el caso que tratamos ahora, pero un aliado muy grande contra los mosquitos tambien es el perinquén o perenquen, una especie de lagarto pequeño muy presente en Canarias, que no debemos matar nunca.
Respetemos la naturaleza que nos rodea y así ella nos devolverá el favor, tenemos muchos aliados en el mundo natural, no acabemos con todos, para cualquier otro tipo de plagas malignas, mejor llamar a profesionales, como TENEPLAGAS que cuenta con años de experiencia y el método más eficaz para acabar con su problema. Llámenos y pida presupuesto sin compromiso, por teléfono, por la web o por Whatsapp, le ofreceremos el precio que no espera y el servicio que desea.